«Las películas tienen el poder de capturar los sueños».
Georges Méliès
(París [Francia], 8 de diciembre de 1861 – Ibidem, 21 de enero de 1938)
Ilusionista, cineasta, actor y fabricante de juguetes
Las películas tienen el poder de capturar los sueños| Georges Méliès
Marie-Georges-Jean Méliès fue un ilusionista y cineasta francés famoso por liderar muchos desarrollos técnicos y narrativos en los albores de la cinematografía.
Fue un prolífico innovador en el uso de efectos especiales y popularizó técnicas como el truco de parar (‘stop trick’). Además fue uno de los primeros cineastas en utilizar las exposiciones múltiples, la cámara rápida, las disoluciones de imágenes y la película en colores. Asimismo, fue pionero en el uso de guiones gráficos.
Y gracias a su habilidad para manipular y transformar la realidad a través de la cinematografía, Georges Méliès es recordado como un ‘mago del cine’.
2 de sus películas más famosas, ‘Viaje a la Luna’ (1902) y ‘Viaje a través de lo imposible’ (1904), narran viajes extraños, surreales y fantásticos inspirados por Julio Verne. Además se las considera como 2 de las cintas más influyentes y notables del cine de ciencia ficción.
Y también fue pionero del cine de terror gracias a su temprano film de 1896 ‘Le Manoir du Diable’ (‘La mansión del diablo’).
Más de 500 cintas cinematográficas
Georges Méliès dirigió más de 500 películas entre 1896 y 1913, con duraciones que oscilaban entre 1 y 40 minutos. Además, la temática de sus películas solía ser similar a la de los espectáculos de magia que había realizado en su trabajo como ilusionista. Con trucos y sucesos imposibles, como objetos que desaparecen o cambian de tamaño.
Estas primeras películas de efectos especiales carecían en esencia de argumento. Los efectos especiales se utilizaban sólo para mostrar lo que era posible, más que para mejorar la narración general. Por otra parte, sus primeras obras se componían en su mayoría de efectos únicos en cámara, utilizados durante toda la película. Por ejemplo, tras experimentar con la exposición múltiple, en 1900 realizó su película ‘L’Homme-Orchestre’ (‘El hombre orquesta’) en la que interpretaba a 7 personajes diferentes de forma simultánea.
Entre 1915 y 1923, Georges Méliès montó, con la ayuda de su familia, numerosos espectáculos en 1 de sus 2 estudios cinematográficos que transformó en teatro.
Sin embargo, el plagio por parte de diversos realizadores cinematográficos de la época se sumó a la lista de motivos por los cuales el director abandonó el medio.
Transformado en fabricante de juguetes
Y, en 1923, acosado por las deudas, tuvo que vender sus propiedades y abandonar Montreuil-sous-Bois, el primer estudio cinematográfico en Francia que el mismo había creado en la primavera de 1897.
Por último, en 1925, se reencontró con una de sus principales actrices, Jehanne d’Alcy, que entonces regentaba un quiosco de juguetes y golosinas en la estación de Montparnasse (París). Se casó con ella y comenzó a regentar junto a ella la tienda y a vender los juguetes que el mismo inventaba. Allí le reconocerá años más tarde Léon Druhot, director de ‘Ciné-Journal‘, quien lo rescatara del olvido.
Ese mismo año de 1925, será redescubierta su obra por la vanguardia cinematográfica francesa, en especial por los surrealistas, que reivindicaron su figura. Ese reconocimiento llegó hasta el punto de que fue galardonado en 1931 con la Legión de Honor por toda su trayectoria.
Hoy, en la frase del domingo en Pongamos que Hablo de Madrid | La Revista de Madrid, Georges Méliès afirma «Las películas tienen el poder de capturar los sueños».