Hoy lunes 2 de junio de 2014 es un día histórico: Juan Carlos I de Borbón y Borbón-Dos Sicilias ha abdicado como Rey de España, cargo que ha ejercido desde el 22 de noviembre de 1975 hasta la fecha.
Francisco Franco nombró a Juan Carlos de Borbón como sucesor a título de rey, según la Ley de Sucesión en la Jefatura del Estado de 1947. Después, este nombramiento fue ratificado por las Cortes Españolas el 22 de julio de 1969, previo juramento ese día del futuro rey de guardar y hacer guardar las Leyes Fundamentales del Reino y los Principios del Movimiento Nacional.
Sin embargo, Juan Carlos I se basó en las facultades que estas leyes franquistas le otorgaban para impulsar el cambio de régimen y facilitar el advenimiento de la actual democracia española, nombrando Presidente del Consejo de Ministros a Adolfo Suárez que llevó a cabo lo que se ha venido en llamar ‘La transición española’.
Ahora le sucederá su hijo Felipe de Borbón y Grecia ‘que subirá al trono’ como Felipe VI perpetuando así una larga tradición de reyes y casas reinantes: el primer Felipe, conocido como ‘el Hermoso’, era esposo de Juana de Castilla, hija de los Reyes Católicos, y fue el primer monarca de la Casa de Austria. El último en llevar ese nombre, conocido como ‘el Animoso’, fue también el primer monarca de la Casa de Borbón. Felipe I nació en Brujas, Flandes, actual Bélgica. Felipe V nació en Versalles, Francia. Juan Carlos I nació en Roma, Italia. El futuro Felipe VI nació en Madrid, España.
La monarquía es una tradición que se remonta a la Antigüedad Clásica, se refuerza en la Edad Media, se resiente en la Edad Moderna y se sostiene en la Edad Contemporánea. La pregunta del título, ¿Una moderna monarquía del siglo XXI?, es, por tanto, es incongruente y retórica, porque ¿cómo puede ser moderna una monarquía?