«El mundo atraviesa una encrucijada y un desconcierto en cuanto a la propia consideración de la sociedad humana ante sí misma».
Antonio Buero Vallejo
(Guadalajara [España], 29 de septiembre de 1916 – Madrid [España], 29 de abril de 2000)
Escritor y dramaturgo
El mundo atraviesa una encrucijada | Antonio Buero Vallejo
Desde su niñez, Antonio Buero Vallejo se sintió atraído por la pintura, leyó numerosos textos dramáticos de la biblioteca paterna y asistió con frecuencia al teatro. Estudió el bachillerato en su ciudad natal y en Larache y Tetuán (Marruecos), donde estuvo su padre destinado entre 1927 y 1929.
Por su cuento ‘El único hombre’ recibió en 1933 el 1er premio del Certamen Literario de la Federación Alcarreña de Estudiantes. De 1934 a 1936 realizó estudios en la Escuela de Bellas Artes de San Fernando de Madrid. Además, colabora en tareas de difusión cultural organizadas por la Federación Universitaria de Estudiantes (FUE). Y publica en la ‘Gaceta de Bellas Artes’ 2 artículos firmados como Nicolás Pertusato.
Comenzada la Guerra Civil, participa con otros estudiantes de Bellas Artes en las labores de la Junta de Incautación y Protección del Patrimonio Artístico. En 1937 es movilizada su quinta y sirve a la República en varios destinos. Escribió y dibujó en las sucesivas etapas del periódico del frente ‘La Voz de la Sanidad’ y participó en diversas actividades culturales. Además se afilió al Partido Comunista de España (PCE) durante la contienda. Al finalizar esta, se encuentra en Valencia y es recluido en un campo de concentración en Soneja (Castellón).
Cuando es liberado regresa a Madrid, donde realizó actividades clandestinas de falsificación de documentos de identidad. Por ello fue encarcelado en agosto de 1939 y en un consejo de guerra con procedimiento sumarísimo, celebrado en a principios de 1940, es condenado a muerte por ‘adhesión a la rebelión’. La sentencia se hace ejecutiva, pero la pena capital se le conmuta por la inferior en grado, 30 años de reclusión mayor. Así que pasa por diversas prisiones. Y, en la madrileña de Conde de Toreno, dibuja el conocido retrato de Miguel Hernández (al que ha conocido en un hospital de Benicasim). Así como los de muchos compañeros, algunos de los cuales, junto a otros de infancia y juventud, se publican en ‘Libro de estampas’.
No obstante, en 1944, de nuevo se le conmuta la pena por la de 21 años y 1 día. Y en 1946 se le concede la libertad condicional con destierro de Madrid. Así que reside en el cercano pueblo de Carabanchel Bajo, todavía no incorporado a la capital. Por fín, es indultado en 1947 y fija de nuevo su residencia en Madrid. Aunque el certificado de liberación definitiva está fechado y firmado en Ocaña (Toledo) el 10 de noviembre de 1959.
Producción dramática de Antonio Buero Vallejo
El tema común que liga toda la producción dramática de Antonio Buero Vallejo es la tragedia del individuo, analizada desde un punto de vista social, ético y moral. Así, los principales problemas que angustian al hombre se apuntan ya en su primera obra, ‘En la ardiente oscuridad’, y continúan en obras posteriores. Y se refleja en su frase «El mundo atraviesa una encrucijada y un desconcierto…».
En 1948, por vez primera después de la Guerra Civil, el Ayuntamiento de Madrid convoca el Premio Lope de Vega. Y Buero Vallejo presenta las obras ‘En la ardiente oscuridad’ (redactada en 1946) e ‘Historia de una escalera’ (escrita entre 1947 y 1948), que, por unanimidad, recibe el galardón. Sin embargo, al conocerse la identidad y la biografía del ganador, la sorpresa es grande y el estreno padece algunas dificultades. por fin tiene lugar en el Teatro Español de Madrid el 14 de octubre de 1949.
Asimismo, la crítica ha clasificado su obra en teatro simbolista, teatro de crítica social y dramas históricos. A continuación encontrarás algunas de las piezas teatrales de Antonio Buero Vallejo en cada uno de estos 3 apartados, con el año de su estreno. Su dramaturgia total alcanza 27 obras.
Teatro simbolista
- ‘En la ardiente oscuridad’ (1950),
- ‘La tejedora de sueños’ (1952),
- ‘Irene, o el tesoro’ (1954) y
- ‘La Fundación’ (1974).
Teatro de crítica social
- ‘Historia de una escalera’ (1949),
- ‘Las cartas boca abajo’ (1957),
- ‘El tragaluz’ (1967) y
- ‘Jueces en la noche’ (1979).
Dramas históricos
- ‘Un soñador para un pueblo’ (1958),
- ‘Las Meninas’ (1960),
- ‘El concierto de San Ovidio’ (1962) y
- ‘El sueño de la razón’ (1970).
En la frase del domingo en Pongamos que Hablo de Madrid | La Revista de Madrid, Antonio Buero Vallejo afirma: «El mundo atraviesa una encrucijada y un desconcierto en cuanto a la propia consideración de la sociedad humana ante sí misma».