El cantautor Joaquín Sabina públicó ‘Malas compañías’, su 2º álbum, en 1980. Y en él aparece por 1ª vez la canción ‘Pongamos que hablo de Madrid’. Fue tras su regreso a España desde Inglaterra y la publicación de ‘Inventario’, su primer disco.
En esta conocida canción, ya emblemática, retrata aquella urbe cosmopolita, veloz y descarnada de los tiempos de ‘La Movida Madrileña’. Y lo hace gracias a la descripción de acontecimientos y sensaciones de aquella inolvidable época. Un tema que ya ha pasado a formar parte del imaginario icónico madrileño.
Pongamos que hablo de Madrid
Allá donde se cruzan los caminos,
donde el mar no se puede concebir,
donde regresa siempre el fugitivo,
pongamos que hablo de Madrid.
Donde el deseo viaja en ascensores,
un agujero queda para mí,
que me dejo la vida en sus rincones,
pongamos que hablo de Madrid.
Las niñas ya no quieren ser princesas,
y a los niños les da por perseguir
el mar dentro de un vaso de ginebra,
pongamos que hablo de Madrid.
Los pájaros visitan al psiquiatra,
las estrellas se olvidan de salir,
la muerte viaja en ambulancias blancas,
pongamos que hablo de Madrid.
El sol es una estufa de butano,
la vida un metro a punto de partir,
hay una jeringuilla en el lavabo,
pongamos que hablo de Madrid.
Cuando la muerte venga a visitarme,
que me lleven al sur donde nací,
aquí no queda sitio para nadie,
pongamos que hablo de Madrid.
Joaquín Sabina
(Madrid 1980)
Discos
Además del original, con música de Antonio Sánchez, podemos encontrar este tema, entre otros, en los discos siguientes:
- ‘Malas Compañías’ de Joaquín Sabina (1980),
- ‘La Mandrágora’ de Joaquín Sabina, Javier Krahe y Alberto Pérez (1981),
- ‘Al Caer el Sol’ de Antonio Flores (1981),
- ‘Joaquín Sabina y Viceversa en directo’ de Joaquín Sabina (1986) y
- ‘Clasicos’ de Porretas (2000).