La literatura que no es aliento | Aleksandr Solzhenitsyn

La literatura que no es aliento | Aleksandr Solzhenitsyn

La literatura que no es aliento para la sociedad contemporánea, que no se atreve a transmitir los dolores y los temores de la sociedad, que no advierte a tiempo las amenazas contra la moral y los peligros sociales, no merece el nombre de literatura, sino que es solo una fachada. Esa literatura pierde la confianza de su propio pueblo, y sus obras publicadas se utilizan como papel higiénico en lugar de ser leídas

Aleksandr Solzhenitsyn

[Kislovodsk, (Unión Soviética),11 de diciembre de 1918 – Moscú, (Federación de Rusia) 3 de agosto de 2008]

Escritor, historiador y ensayista

La literatura que no es aliento | Aleksandr Solzhenitsyn

Crítico del socialismo soviético, Aleksandr Isáyevich Solzhenitsyn —Александр Исаевич Солженицын en ruso— contribuyó a dar a conocer el Gulag, el sistema de campos de trabajos forzados de la Unión Soviética en el que él estuvo preso desde 1945 hasta 1956.

Gran parte de sus trabajos fueron censurados por el aparato estatal soviético. Sin embargo, su obra alcanzó una fama notable. Y sobre todo ‘Archipiélago Gulag’, 3 ensayos reportajes publicados en 1973, 1975 y 1978. Así como sus novelas:

  • ‘Un día en la vida de Iván Denísovich’ (1962),
  • ‘Pabellón del cáncer’ (1968).
  • ‘El primer círculo’ (1968),
  • ‘Agosto de 1914’ (1971, aunque revisada y ampliada en 1983).
  • ‘Noviembre de 1916’ (1983),
  • ‘Marzo de 1917’ (1986) y
  • ‘Abril de 1917’ (1991).

En 1974 fue expulsado de la Unión Soviética y se le retiró la ciudadanía. Aunque se le restituyó 16 años después, en 1990. Y, tras la disolución de la Unión Soviética en 1994,​ regresó a Rusia donde permaneció hasta su muerte.

En 1970, fue galardonado con el Premio Nobel de Literatura «por la fuerza ética con la que ha continuado las tradiciones indispensables de la literatura rusa». En 1973, recibió el Premio Templeton, que se concede a las personalidades que contribuyen a la investigación o los descubrimientos de realidades espirituales. Y en 2006, se le otorgó el Premio Estatal de la Federación de Rusia para la actividad humanística.

En esta frase, el escrito ruso Aleksandr Solzhenitsyn afirma que «La literatura que no es aliento para la sociedad contemporánea, que no se atreve a transmitir los dolores y los temores de la sociedad, que no advierte a tiempo las amenazas contra la moral y los peligros sociales, no merece el nombre de literatura, sino que es solo una fachada…».




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