El Templo de Debod fue inaugurado en su actual ubicación en Madrid el 20 de julio de 1972, hace hoy 50 años. Y para garantizar su buen estado, el Ayuntamiento de Madrid pondrá en marcha un Plan de Conservación Preventiva en permanente actualización.
En 1968, la entonces República Árabe Unida donó a España el Templo de Debod. En compensación por la ayuda al salvamento de los templos de Abu Simbel, en el marco de la Campaña de Salvamento de los Monumentos de Nubia. Decretada por la UNESCO a causa de la construcción de la presa de Asuán.
Sus más de 1.350 sillares originales ocupan 270 m2 de planta y el conjunto alcanza una longitud de 70 metros. Se trata del edificio de mayores dimensiones que ha salido de Egipto, muy superiores a las de los otros 3 templos donados a Estados Unidos (Nueva York), Italia (Turín) y Países Bajos (Leiden). Y sus grandes dimensiones obligaron a su emplazamiento al aire libre. Aunque con el compromiso de que se cubriría en el futuro. De acuerdo con las condiciones de la UNESCO para la cesión de los templos egipcios.
Además, con el fin de proteger sus piedras y, en especial, sus preciados relieves del agua de lluvia, el edificio quedó aislado del suelo. Asimismo se reconstruyeron las fachadas perdidas en el siglo XIX, Y también se cubrió su terraza. Por otra parte, su entorno, que abarca 6 hectáreas, fue ajardinado con varias especies de palmeras. Y, por último, se construyeron 2 estanques que rememoran su antiguo emplazamiento a orillas del Nilo.
El Templo de Debod cumple 50 años en Madrid
En 1960 se instituyó en España un grupo de salvamento para los monumentos de Nubia, que se llamó Comité Español. Su director fue Martín Almagro Basch, profesor y arqueólogo español, que colaboró en la excavación de los yacimientos de Nubia, en Egipto y en Sudán. Sin embargo, las obras de excavación en el yacimiento ocupado por el templo de Debod no las llevó a cabo el Comité Español. Ya que las realizó el Servicio de Antigüedades de Egipto y un equipo de la Misión Arqueológica polaca. Asimismo, la UNESCO encargó el trabajo de copiar todas las inscripciones del templo a 2 egiptólogos franceses..
Así, en 1961, una vez desmontado el templo, se traslado a la isla Elefantina, junto a Asuán, la antigua Siena. Allí permanecieron la mayoría de los bloques de piedra hasta el mes de abril de 1970, en que de nuevo viajaron, Esta vez, rumbo a Alejandría. Y el 6 de junio de 1970, las cajas embaladas que contenían los bloques del templo de Debod fueron embarcadas en el buque Benisa y llegaron al puerto de Valencia (España) el 18 de ese mismo mes. Desde Valencia fueron transportadas en camiones hasta Madrid, donde se almacenaron en el solar del antiguo Cuartel de la Montaña, destruido durante la Guerra Civil Española.
No obstante, la tarea de los arqueólogos españoles bajo la dirección de Martín Almagro fue difícil. Ya que el Servicio de Antigüedades de Egipto sólo entregó un plano y un croquis del alzado del monumento. Junto con algunas fotografías sin referencia de ninguna clase. De las 2.300 piezas que había que encajar, más de 100 bloques habían perdido la numeración y muchos fragmentos llevaban una marca que no correspondía al plano. Por fin, tras varios titubeos, se reconstruyó el templo de Debod y se inauguró el 20 de julio de 1972.
Estado de conservación del Templo de Debod
El Área de Cultura, Turismo y Deporte del Ayuntamiento de Madrid y la Fundación Santa María la Real han elaborado un diagnóstico sobre el estado de conservación del Templo de Debod. Y de él se desprende que el templo no requiere de acciones inmediatas, al no mostrar afecciones o patologías de gravedad que lo pongan en riesgo.
Asimismo, gracias a estos estudios, se pondrá en marcha un Plan de Conservación Preventiva no estanco. Y que irá actualizando de manera periódica.
La 1ª acción consiste en remitir los resultados de los estudios realizados a diversas universidades y a las principales instituciones de España vinculadas a la conversación de bienes culturales. Entre ellas, las siguientes:
- Real Academia de Bellas Artes de San Fernando,
- Colegio Oficial de Arquitectos de Madrid (COAM),
- Museo Arqueológico Nacional (MAN) o
- Instituto del Patrimonio de España.
El objetivo es contar con su colaboración y poder analizar el tratamiento que el templo requiere. Y en un debate que se amplíe al ámbito internacional. Así se abordará con criterio y rigurosidad científica la toma eventual de decisiones de envergadura para proteger y conservar el Templo de Debod.
De este modo, la decisión sobre los pasos a seguir para el buen mantenimiento del Templo de Debod se tomará por tanto de manera consensuada entre diferentes administraciones y organizaciones. Es decir, la decisión no la tomará el Ayuntamiento de Madrid en solitario, sino que otras administraciones, como el Gobierno de España o la Comunidad de Madrid, también realizarán sus aportaciones. Y, además, también se tendrá en cuenta la opinión de otros expertos.
Uno de los museos más visitados de Madrid
Desde la década de los 80 del siglo XX, el templo de Debod forma parte de los museos municipales madrileños. Y en 2007, a instancias del Ayuntamiento de Madrid, fue declarado Bien de Interés Cultural (BIC) en la categoría de Monumento.
Así, su gran accesibilidad y visibilidad, derivada de su instalación al aire libre, junto a su pertenencia a una cultura tan atractiva y popular como la faraónica, han convertido el templo de Debod en uno de los museos más visitados de la ciudad de Madrid.
En 2019, el templo recibió 237.393 visitantes. No obstante, estas cifras descendieron de manera brusca en 2020 (75.966 visitantes) y en 2021 (87.664), a causa la pandemia de COVID-19 y las restricciones que ocasionó. Sin embargo, en 2022 el número de visitantes del templo se ha incrementado hasta los 55.226 entre enero y junio, lo que supone un 76,6 % más que en el mismo periodo de 2021 (31.264).
La ciudad de Madrid tiene la suerte de albergar uno de los pocos edificios faraónicos completos que pueden verse fuera de Egipto. Y, por este motivo, para el Consistorio madrileño es una obligación y una gran responsabilidad asegurar la mejor conservación del templo de Debod.
