Sala Colección Carmen Thyssen-Bornemisza | Madrid

Colección Carmen Thyssen-Bornemisza: nueva instalación

Pablo Picasso | 'Los segadores' (1907) | Colección Carmen Thyssen-Bornemisza | Madrid

El Museo Nacional Thyssen-Bornemisza de Madrid presenta la nueva instalación de la Colección Carmen Thyssen-Bornemisza. Así, una selección de 180 obras se exhibe en las salas de la planta baja del museo madrileño. Y con acceso directo e independiente de la colección permanente.

La nueva instalación de la Colección Carmen Thyssen-Bornemisza se anuncia tras el acuerdo alcanzado entre el Ministerio de Cultura y Deporte y la baronesa Carmen Thyssen-Bornemisza. Y por el mismo se establece un alquiler anual de 6,5 millones de euros durante 15 años, con derecho a compra, de 330 obras de arte internacional de su colección particular.

Esta nueva ubicación y discurso expositivo permite redescubrir la Colección Carmen Thyssen-Bornemisza de una forma más coherente y global, con un recorrido cronológico que va desde la pintura holandesa del siglo XVII y el vedutismo veneciano del XVIII hasta el arte del siglo XX. Una nueva disposición que fluye de una forma más armónica a través de las salas. Y además permite destacar sus principales hitos, tanto en cuanto a los movimientos artísticos mejor representados como a las piezas más importantes.

Así, culmina la reordenación de las colecciones Thyssen, tras la apertura en 2021 de la reinstalación de toda la colección permanente en las plantas 1 y 2 del Palacio de Villahermosa.

Colección Carmen Thyssen-Bornemisza: nueva instalación

Paul Gauguin | 'Mata Mua' -Érase una vez- (1892) | Colección Carmen Thyssen-Bornemisza | Madrid

El discurso expositivo de la Colección Carmen Thyssen-Bornemisza sigue el mismo criterio cronológico que marca el recorrido de la colección permanente. Así, empieza por la sala dedicada a pintura antigua, en su mayoría de paisajes, con la escuela holandesa del siglo XVIII y el vedutismo italiano del
XVIII como principales protagonistas. Obras de Ruisdael, Van der Neer o Van Goyen comparten espacio con piezas destacadas de Canaletto, Guardi y Vanvitelli. Y completan el conjunto algunos ejemplos del rococó francés, con obras de Quillard y Fragonard, entre otras.

A continuación, el recorrido se adentra en el paisajismo naturalista del siglo XIX con 2 espacios diferenciados para presentar, por un lado, la obra de pintores europeos, y por otro, la escuela norteamericana. Entre los primeros destacan 2 piezas clave:

  1. ‘La Soledad’ de Corot, que se presenta rodeada de otros pintores de la Escuela de Barbizon como Robinson o Daubigny; y
  2. ‘Molino de agua en Gennep’, de la etapa holandesa de Vincent van Gogh, que cuelga junto a obras de Mauve, Israëls y Lhermitte, artistas fundamentales para entender el Van Gogh de ese período.

De la escuela norteamericana cabe destacar los lienzos de Albert Bierstadt o de Martin Johnson Heade que, junto a los del resto de artistas representados, ofrecen una visión muy completa del paisajismo estadounidense del XIX.

Impresionistas y Paul Gauguin

La siguiente sala muestra las grandes obras impresionistas de la Colección Carmen Thyssen-Bornemisza . Y también con 2 secciones dedicadas aquí al impresionismo francés y al norteamericano. En la primera, se reúnen magníficos óleos de Pissarro, Sisley, Monet o Renoir. Y entre los impresionistas norteamericanos destaca las obras de Childe Hassam, Merrit Chase, Frieseke o Twachtman, entre otros.

Con un total de 8 pinturas, un dibujo y una escultura, Paul Gauguin es el protagonista principal del siguiente espacio. Y en el mismo se dedica un lugar central a una de las joyas de la colección: ‘Mata Mua’. Además, junto al resto de sus obras se exponen las de algunos representantes de la escuela de Pont-Aven y de los nabis, como Émile Bernard, Paul Sérusier, Maurice Denis o Édouard Vuillard.

Neoimpresionismo, primeras vanguardias europeas y expresionismo alemán

El siguiente espacio está dedicado al neoimpresionismo, con cuadros de Paul Signac, Maximilian Luce, Henri-Edmond Cross o Théo Van Rysselberghe. Y se incluyen ejemplos de otros artistas que muestran la influencia de este movimiento en algún momento de su trayectoria. Así se ve  en ‘Vista desde la casa del hermano de la artista, Bonn’ de Gabriele Münter, ‘La Ludwigskirche en Múnich’ de Wassily Kandisnky o ‘Naturaleza muerta con papagayo’ de Robert Delaunay.

A continuación, la visita se adentra en las primeras vanguardias europeas, en especial en el fauvismo y el expresionismo. Del primero, se reúne un importante conjunto de obras que ilustran a la perfección la evolución del movimiento entre 1905 y 1907. Con lienzos de sus principales representantes: Derain, Vlaminck, Matisse, Manguin o Dufy. Aunque también de la etapa ‘fauve’ de pintores como George Braque o Edvard Munch.

Asimismo, el expresionismo alemán es uno de los capítulos más nutridos. Y el que mejor evidencia la herencia del gusto artístico del barón en la Colección Carmen Thyssen. Así se presentan piezas de Kirchner, Pechstein, Heckel o Nolde. Y las acompañan algunos ejemplos de otras vanguardias europeas, con obras de Delaunay, Picasso o Natalia Goncharova.

Este paseo por el arte del siglo XX culmina en las salas siguientes con obras de artistas europeos y estadounidenses. Como Joan Miró, Juan Gris, Paul Delvaux, Frantiseck Kupka, Max Beckmann o Victor Vasarely, entre los primeros. Y Charles Bel o Richard Estes, entre los segundos.




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