El cartero siempre llama dos veces | La perla de Carla 2020 | Manuel del Pino | PqHdM

El cartero siempre llama dos veces | La perla de Carla 2020

A la agente Carla le gustaba leer novelas policíacas clásicas, como ‘El cartero siempre llama dos veces‘ de James M. Cain. Su sorpresa fue ver en la realidad superada esa ficción.

Un caso que parecía inspirar esa novela, de forma casi idéntica, pero más truculenta aún. Y no en la América del siglo XX, sino en la España del XXI.

La madre de Salvador denunció su desaparición en la comisaría de Montera 16. Era una mujer mayor, a quien su hijo llamaba por teléfono todos los días sin falta. Sin embargo, llevaba dos días sin llamarla. Según la pobre mujer, algo malo tenía que haberle pasado a su hijo.

La agente Carla y el oficial Morales se presentaron en el chalet de Salvador. Hicieron unas preguntas a la esposa, Sara, una mujer de treinta y tantos, morena, atractiva y con una seguridad en sí misma que llegaba a intimidar, por demasiado fría.

¿Dónde está su marido? -le preguntó la agente Carla.
Salió de viaje el lunes. Tenía un congreso de empresa. Estará al volver.

Morales dijo que era mejor irse y dejarlo estar, pero Carla observó a Sara.

Yo la recuerdo. Usted es policía, ¿no? De la nacional.
Sí, ¿qué pasa? Creía que estábamos para ayudarnos.

Sara Castro era compañera del gremio, para más inri. Aunque miraba a los Agentes de Proximidad con un cierto desdén, como si hubiera policías de primera y de segunda. Estaban en la entrada del chalet, donde Sara se disponía a subir a su berlina negra.

-¿Se iba? -le inqurió Carla.
Sí, empiezo turno a las 3. ¿Algún problema?
¿Podemos ver las llamadas de su móvil?

Sara Castro se enfadó de veras, o así lo demostró. Se dirigió al oficial Morales, desdeñando adrede encontrarse con el rostro de la inquisitiva Carla:

Para eso deben traer una orden judicial. ¿La tienen? ¿Verdad que no? Y haga el favor de meter a su agente en cintura, antes de que les meta una denuncia. Quedaría muy feo, peleas entre colegas de policías amigas.

El caso era que Morales ya se estaba empezando a escamar también con la altanería de Sara. O quizá se sentía ofendido sin más. Y decidió dejar hacer a su agente favorita.

Carla dirigió su atención hacia la berlina negra.

-¿Puede enseñarnos el interior de su coche?
No tienen una orden judicial -repitió su cantinela Sara.
No se mueva -dijo Morales y, después, a Carla-: Llama a la comisaría, que vengan los efectivos disponibles. Y con una orden judicial de registro para toda la casa y el coche.

Sara se dio por vencida. En el maletero estaba el cuerpo de su exmarido, el desdichado Salvador. Y poco después se presentó su ‘amigo’ policía, Roberto García, para ‘recogerla’.

Aquello no cuadraba. Por supuesto, Sara y Roberto lo negaron todo.

Se abrió un largo y complicado juicio. Y en el mismo costó demostrar que Sara y Roberto, amantes, se pusieron de acuerdo para eliminar al pobre Salvador.

Y es que, en ocasiones, no es que el cartero siempre llama dos veces a la puerta, sino mil.

El cartero siempre llama dos veces | La perla de Carla 2020

Y aquí está la nueva entrega semanal de ‘La perla de Carla’. La serie cómica y mordaz, pero sobre todo actual, de Manuel del Pino para Pongamos que Hablo de Madrid.




No hay comentarios

Añadir más

Deja tu opinión | ¡Nos interesa! | Gracias

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Descubre más desde Pongamos que Hablo de Madrid

Suscríbete ahora para seguir leyendo y obtener acceso al archivo completo.

Seguir leyendo